esglobal:Depende: el desplome de los precios del petróleo

21 enero 2015

Andrés Cala

Categoría: Economía petróleo
David McNew/Getty Images
David McNew/Getty Images
La caída de los precios del crudo que estamos viviendo solo tiene un precedente en la Historia, empezando en la segunda mitad de 2008, al comienzo de la peor crisis económica global en casi un siglo. Es esa ocasión fue la incertidumbre sobre cuánto se contraería la economía mundial. Ahora se debe a la pura y dura manipulación del mercado por parte de Arabia Saudí, país que se niega a recortar la producción, tumbando los precios del barril de Brent más de 55%, alrededor de los 50 dólares desde junio de 2014. Los mercados escarban por cualquier pista que indique un suelo, pero por primera vez no será la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) quien decida.

“La OPEP recortará la producción tarde o temprano”
Irrelevante porque la unidad de la OPEP es nula. En todo caso, Arabia Saudí es el único capaz de afectar el suministro abriendo y cerrando el grifo a su antojo. Pero los saudíes tienen poco incentivo para recortar la producción, al menos hasta el verano, y por tanto el suministro global seguirá aumentando.
Su motivación es tanto geopolítica como económica. Por un lado, pretende paliar el músculo de Irán, su máximo adversario, y el de Rusia, que junto con Teherán es el mayor obstáculo en su agenda regional. Y al mismo tiempo busca reconfigurar a golpe de fuerza y a su conveniencia el mercado del crudo, atacando a sus competidores con una estrategia monopolística clásica.
Pero al hacerlo no solo mata a la OPEP, sino que Riad abandona su papel como regulador de precios, que es la fuente de su poder. El mercado encontrará su equilibrio, como lo hace siempre, pero la corrección vendrá por el lado de la demanda y del suministro fuera de la OPEP. De hecho, a medida que bajan los precios del oro negro, los bancos de inversión y organismos como la Agencia Internacional de la Energía van aumentando sus proyecciones, anticipando un mayor incremento de la demanda. Cuesta menos, por tanto, se consume más. Paralelamente los altos precios, tal y como pretende Arabia Saudí, sacarán del mercado la producción de crudos más caros. Qué países ganan: los que ofrezcan la mejor relación entre volumen y coste, donde los saudíes tienen una clara ventaja.
Arabia Saudí sí recortará su producción, seguramente, dependiendo de cuándo se suavicen las sanciones contra Irán. Pero para entonces, el mercado habrá absorbido su nueva política petrolera unilateral, y no como árbitro, bombeando a niveles máximos como lo hace Rusia, Estados Unidos y la gran mayoría de países fuera de la OPEP.

“Rusia e Irán son los más perjudicados por los saudíes” 
En términos económicos absolutos, sí. Rusia es el segundo mayor exportador del mundo, pero con costes de producción y transporte en torno a los 30 dólares por barril, comparado a los cinco dólares de Arabia Saudí. Además el desplome coincide con las sanciones de Occidente, la devaluación de su moneda y otras dolencias que sin duda atenúan su política exterior. El caso de Irán, el otro presunto objetivo de Riad, es parecido, con la salvedad que lleva años acomodándose al desplome de su ingreso petrolero y que su gasto público no es tan dependiente de los ingresos del crudo (según dijo el presidente iraní, Hasán Rohaní, recientemente, el 30% es para Irán en contraste con más del 90% para Arabia Saudí y Kuwait).
Estamos hablando de Rusia e Irán, ambos países poseen importantes reservas económicas y la voluntad de resistencia. Pueden soportar el golpe mejor que muchos otros grandes y medianos productores y están plenamente preparados para hacerlo, aunque no les guste nada lo que los saudíes están haciendo. Además, la prioridad de Moscú es Ucrania y su vecindario, mientras que para Teherán son las negociaciones para suavizar las sanciones de Occidente.
A corto plazo ambos Esatdos tendrán que adaptarse como Occidente lo hace cuando le toca pagar altos precios del petróleo. Pero bajo ninguna circunstancia Riad va a obligar a ninguno de los dos a claudicar, lo cual implicaría que el Kremlin aceptará el fin del régimen sirio y que Teherán se replegará a lo largo de Oriente Medio, sobre todo en Siria, Líbano, Yemen y Bahréin.

“La producción de esquistos de Estados Unidos disminuirá”
No exactamente. La prensa se ha centrado en los esquistos porque presumiblemente es el blanco de los saudíes en el plano económico. Es verdad que los costes marginales de producción son de alrededor de 70 dólares por barril, pero gran parte de la explotación actual está por debajo de los 50 dólares por barril. Esto quiere decir que la producción de esquistos seguirá aumentando, simplemente no lo hará al ritmo vertiginoso de los últimos años.
Los productores de esquistos gozan de un músculo financiero importante que amortiguará el golpe durante unos meses y de una curva tecnológica que les ha permitido rebajar costes de manera rápida, algo que no ocurre en la explotación tradicional.
La explotación de esquistos además es más versátil. Requiere de un capital inicial más alto que el de las convencionales, pero su producción repunta mucho más rápido, ofreciendo un retorno de la inversión más atractivo. Ahora sus pozos se agotan más rápido y la sostenibilidad económica requiere perforar muchos más. Es la naturaleza misma de su industria, algo que les permite más fácilmente graduar sus inversiones y adaptarse a esta coyuntura.
De hecho, un estudio detallado de la consultora Wood Mackenzie que evaluó los pozos que producen el 75% del petróleo mundial, concluye que a 50 dólares por barril, menos de 0,2% de la producción global entraría en pérdidas. Si cae a los 45 dólares, solo el 0,4% entraría en números rojos, pero si disminuye a los 40 dólares habría una corrección fuerte ya que el 1,6% sería inviable. Los esquistos no perderían dinero hasta por debajo de los 40 dólares.

“La inversión en producción futura caerá”
Sin duda. Y aquí hay que diferenciar entre producir a pérdida y dejar de invertir. Son dos cosas muy distintas. La primera tiene un efecto inmediato y la segunda se absorbe a lo largo de meses.
Antes de que se vean afectados los esquistos, muchos otros sufrirán las consecuencias de la política saudí. El coste marginal de producción de las arenas bituminosas de Canadá es de 90 dólares por barril y el de las aguas profundas de Brasil de 80 dólares por barril. En circunstancias similares se encuentran las explotaciones marítimas de África como Ghana, Costa de Marfil y Angola.
También sufrirán los países con explotaciones maduras que necesitan de inversión fresca y urgente para compensar el declive natural de sus pozos como son México y Venezuela, si bien sus costos marginales actuales son relativamente bajos a 30 dólares. Noruega y Reino Unido los tienen de 50 dólares, pero también son pozos maduros. Y a diferencia de los Estados, las empresas privadas que lideran proyectos en países desarrollados, o que en todo caso aportan capital y tecnología indispensable en ellos, no pueden entrar en déficit.
Finalmente están los suministros alternativos como los biocombustibles en Europa y Brasil con costos marginales de 110 dólares y 65 dólares. En menor medida quedarán tocadas las energías renovables, aunque éstas abastecen sobre todo los mercados eléctricos no a los líquidos que se utilizan en el transporte donde reina el petróleo. Aunque las políticas siguen impulsando su implantación en el mundo desarrollado, los mercados emergentes se enfocan más en la economía, y con precios tan bajos del crudo, se hace más difícil justificarlas.

“El mercado se acomodará”
Sí, pero su configuración será muy distinta. Es poco probable que la producción actual disminuya, pero al crecer mucho menos, mientras la demanda aumenta el mercado, encontrará su equilibrio.
La OPEP seguirá produciendo unos 30 millones de barriles al día, quizás más a medida que Libia e Irak aumentan la producción, en el caso libio más incierto, pero en el caso iraquí ya bien encaminado, y también si Irán recupera terreno. Pero más pronto que tarde la oferta y demanda se estabilizarán por definición.
Y si a eso se añade el riesgo geopolítico, el margen de error saudí es pequeño. Ya ganó la batalla a corto plazo, pero a medio plazo se verá obligado a replegarse.

“Los precios pueden volver a los 115 dólares por barril”
No a corto plazo. Además del aumento de consumo y recortes de inversión están los riesgos geopolíticos. La volatilidad de Oriente Medio es tal que amenaza cada vez más a los saudíes. Este mesyihadistas atacaron un puesto fronterizo de Arabia Saudí desde Irak. Hay amenazas al suministro en todo el mundo, desde Venezuela hasta África, y la caída de precios en países productores incrementa los riesgos geopolíticos.
Si Irán, Irak y Libia vuelven al mercado simultáneamente, hay poco que pueda atajar un desplome de precios de nuevo. La fortaleza del dólar también hunde los precios.
Pero ese es el punto. Los mercados de crudo obedecen a docenas de factores y acontecimientos, a la baja y al alza. Pero de aquí en adelante hay dos certezas: que la OPEP ya no será quien decida, ni siquiera los saudíes, y que el mercado se estabilizará en base a la oferta y demanda tarde o temprano.

Amnistia Internacional: NO A LA FLAGELACION PUBLICA

Hola Asociación Para El Desarrollo ADAH,


El delito de Raif Badawi consistió en crear un sitio en Internet abierto al debate político y social, por el que ahora se enfrenta a 10 años de prisión y a 1.000 latigazos en público.

El pasado viernes se le administraron los primeros 50 latigazos ante la mezquita de Al-Jafali en Yidda. A menos que hagamos algo para impedirlo, las autoridades saudíes administrarán los siguientes 50 latigazos una semana después, es decir, el próximo viernes.

Únete a nosotros para pedir el cese inmediato de estas flagelaciones públicas, y pide al rey de Arabia Saudí que retire todos los cargos contra Raif.

Según un testigo presencial, lo trasladaron en grilletes en un autobús hasta la plaza pública que hay frente a la mezquita al término de la oración. Rodeado de una multitud compuesta de público en general y de efectivos de las fuerzas de seguridad, se le administraron 50 latigazos seguidos en la espalda y las piernas. "Permaneció en silencio, pero viendo su cara y su cuerpo se puede asegurar que padeció un dolor atroz".

Está previsto que los 1.000 latigazos se le administren a lo largo de 20 semanas. Ayúdanos a ponerle fin antes de que sea demasiado tarde.


Atentamente,

May Carolan
Responsable global de campañas sobre individuos en situación de riesgo
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Aparatos informáticos rotos pueden ser reutilizados


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Hasta las computadoras más viejas y los aparatos informáticos rotos pueden ser reutilizados
La mayoría de los aparatos electrónicos viejos del país se encuentran almacenados, debido a la incertidumbre de cómo disponer de estos materiales.
Se calcula que alrededor del 50% de estos residuos están arrumbados en oficinas, hogares, entes públicos o depósitos, más del 40% se entierra o se descarta en basurales y rellenos, y cerca del 10% ingresa en esquemas informales o formales de gestión de residuos. "Esto representa un derroche de recursos que podrían recuperarse, además de una alta fuente de contaminación".
Es importante saber que muchos de estos productos se pueden reutilizar, restaurar o reciclar
 
El trámite es muy sencillo: las personas u empresas que tengan computadoras y otros aparatos en desuso pueden llamar  Reciclados de Honduras para solicitar el retiro sin cargo y nosotros nos ocupamos de la gestión. Te podemos pagar por ellos o si decides donarlos nosotros aportaremos a FUNHCAE (Fundación Hondureña de Capacitación Especial) L.0.50 por libra recolectada.
RECICLADOS DE HONDURAS
9 calle, 15 ave., S.O. Barrio Suyapa. Tels.   9626-0070; 3273-4585; 8938-3741
San Pedro Sula, Honduras
e-mail: recicladosdehonduras@yahoo.com
Horario: Lunes a Viernes: 8:00 a.m.  A 5:00 p.m. Sábados: 8:00 a.m.  A 12:00 m




esglobal: Ocho visiones globales sobre la economía en 2015

08 enero 2015 Mario Saavedra

Categoría: crisis Economía euro
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Las tendencias económicas de la mano de varios analistas internacionales. ¿Qué nos espera este año?
El año 2014 ha sido el de los quebraderos de cabeza geoestratégicos. La crisis de Ucrania ha mantenido en vilo a Europa. La anexión rusa de Crimea y Sebastopol, el golpe de Estado y la guerra civil en el país, y los temores a una nueva guerra del gas que encareciera el suministro energético, han tumbado durante buena parte del año la confianza de los inversores y empresarios en la locomotora europea, Alemania. El punto de mayor tensión fue el presunto derribo de un avión con casi 300 personas dentro por parte de rebeldes apoyados por Rusia.
También elevó la volatilidad el desmembramiento de Irak, uno de los principales productores de petróleo, azotado por un nuevo grupo terrorista, Estado Islámico, que desgraciadamente ha ido adquiriendo protagonismo mediático. La guerra entre Hamás e Israel y la crisis del ébola se sumaron a los temores de los mercados durante un periodo breve, aunque sus efectos fueron más contenidos.
En lo puramente económico, los bancos centrales vuelven a estar en la picota. La Reserva Federal estadounidense comenzó a retirar los estímulos, después de que su economía consiguiera reducir el desempleo hasta la zona del 6% y la economía creciera a un ritmo superior al 2,5%. Ahora la cuestión es cuándo subirá Estados Unidos los tipos de interés. Mientras, al otro lado del mundo Japón sigue sufriendo para abandonar su cóctel de estancamiento y deflación. Las Abenomics, como se conoce a las “tres flechas” de Shinzo Abe (política fiscal, reformas y estímulos monetarios), no están dando aún los resultados esperados.
¿Cuál es la receta entonces para crecer? En su ya famoso discurso de Jackson Hole, el banquero central europeo, Mario Draghi, se mostró partidario de pisar el acelerador de la expansión monetaria para reanimar de una vez por todas a la eurozona, maltrecha por el déficit, los ajustes y la austeridad. Con los tipos de interés casi a cero, el BCE ha lanzado un programa de préstamos a los bancos (TLTROs) para que estos a su vez concedan crédito a pequeñas y medianas empresas. Pero la estrategia ha resultado descafeinada. El crédito sigue sin fluir. China, por su parte, parece ya abocada a una ralentización. Está invirtiendo menos en sectores recalentados como las infraestructuras y dando más aire a los servicios, pero la burbuja inmobiliaria es un hecho. La pregunta ahora no es si aterrizará el gigante asiático, sino si lo hará de forma suave o en medio de turbulencias que puedan condicionar al resto.
Así terminamos el año. ¿Y qué nos espera este 2015? Siempre puede aparecer lo que los economistas gustan en llamar un black swan, un cisne negro, un hecho relevante e inesperado que cambie el rumbo de la historia económica. Pero más allá de imponderables, ¿qué vectores económicos tenemos que tener en cuenta para el año que entra? Lo analizamos con la ayuda de ocho analistas internacionales.

Un año difícil para Rusia 
Moscú: Alexander Zharekhin, jefe de proyecto de ALT R&C.
“2015 va a ser un año muy difícil para Rusia. Algunas industrias como el turismo, la distribución y la alta tecnología, muy dependientes de los equipamientos occidentales, van a ser golpeadas con dureza. Los esfuerzos del Banco Central para superar la crisis de divisas ha llevado a una subida de los tipos de interés en la economía del 17-20%. Esto significa que no va a haber catalizadores para la inversión y el sistema bancario va a sufrir mucho. Por supuesto, veremos más inflación. ¿Más lastres para la economía? Crimea, que necesita muchos recursos financieros. Una subida de los precios del petróleo ayudaría mucho. Pero incluso en este caso (y es improbable) el nivel actual de desarrollo institucional va a dificultar el crecimiento económico. Así que mi visión es que vamos a seguir viendo sanciones, una reducción de la demanda y nada de inversión. Una caída económica del 5-7% no es el peor escenario en estas circunstancias. El foco estará en la eficacia inversora del Gobierno (por la falta de sector privado), y la ayuda a los productores domésticos y en el intento de atraer a empresas internacionales.”

Un ‘Quantitative Easing’ para Europa
Bruselas: Silvia Merler, experta en BCE del Instituto Bruegel.
“El acontecimiento más interesante de 2015 va a ser potencial lanzamiento de un paquete de estímulo cuantitativo (Quantitative Easing, QE) por parte del Banco Central Europeo. No es precisamente un evento inesperado en estos momentos, porque las expectativas de inflación son terribles. Los mercados están incluso empezando a descontar que haya un decrecimiento de los precios, una inflación negativa, en el horizonte de un año. El shock del petróleo [en los precios] puede ser mucho peor de lo previsto por el Banco Central Europeo en sus análisis clave. Pero en todo caso yo creo que hay aún unos márgenes de probabilidad amplios sobre su lanzamiento debido a las barreras políticas que se le puedan imponer. Sigue siendo, además, uno de esos eventos cuyos resultados son una incertidumbre, porque no está claro que cuáles serán los mecanismos de transmisión [del Quantitative Easing a la economía] en el caso particular de la zona euro.”

¿Mario Draghi se va a Italia para salvarla?
Copenhague: Steen Jakobsen, economista jefe de Saxobank.
“Mario Draghi abandona la presidencia del Banco Central Europeo y se marcha a Italia para salvarla”, me dice el economista citando uno de sus pronósticos del Informe de Predicciones Extravagantes para 2015, de Saxobank. Describe el siguiente escenario potencial: “Draghi acude a la llamada de Mateo Renzi, que dirige un gobierno en minoría, para ser el presidente de la República. Él es el único creíble para conseguir llevar a cabo el plan de reformas que necesita Italia. Napolitano está muy enfermo, y quiere dejarlo. Jens Weidmann [el presidente alemán del Bundesbank y un halcón contra los estímulos] eventualmente sustituye a Draghi en el BCE. Esa es, de hecho, una de las únicas formas de conseguir unQuantitative Easing en Europa: que uno de los alemanes esté dirigiendo el banco. Ellos, los alemanes, en una especie de quid pro quo, aceptan algún tipo de estímulo monetario. Alemania pasa de ser parte del Consejo a dirigir el Consejo. Sería un Quantitative Easing suave, dirigido por los alemanes, pero un QE al fin y al cabo.”

¿El final de una crisis?
Madrid: Belén San José, analista de Bankinter.
“Lo más relevante en 2015 será el final de una crisis que comenzó ya hace siete años. La subida de tipos de interés para enfriar la economía de la principal potencia mundial, Estados Unidos, marcará el principio del fin. La buena marcha de la economía norteamericana nos traerá previsiblemente esa subida de tipos de interés, y con esto se pondrá fin a años de sobre-estímulos monetarios y se iniciará una nueva etapa hacia la normalización de los mercados. Pero EE UU no será el único en dar carpetazo a una época en la que los mercados han tenido que ser dopados. Reino Unido cuenta con los requisitos necesarios para hacer lo mismo en una economía cada vez más saneada. Y por supuesto, no podremos olvidar las nuevas condiciones a las que nos enfrentaremos, con un entorno de tipos de interés extra-bajos y con unos precios de la energía que nunca habíamos vivido por un periodo de tiempo tan continuado, además de las amenazas por parte de las economías emergentes. Habrá que adaptarse a estas circunstancias que traerán un mercado nuevo, complicado y difícil, al que habrá que ajustar muchas valoraciones y al que habrá que adaptarse para poder batirlo”.

La bolsa cae desde sus excesos actuales 
Munich: Richard Weissend, CEO de OneToOne Corporate Finance.
“Yo diría que hay que estar muy atentos a la evolución de la bolsa. Hemos visto subidas muy fuertes en muchas bolsas globales, pero catalizadas sólo por la gran presencia de liquidez, y no necesariamente por la buena previsión de crecimiento de las empresas que cotizan en ellas. No hay una evolución de la industria que apoye estos niveles de ganancias. Creo que veremos un mercado de valores más bajo que ahora a finales de 2015. La renta variable está desacoplada de la economía real. Siempre es un poco así, porque mira al futuro y no al presente, son simplemente esperanzas de precio. No es necesario que estén acoplados, pero es que ahora están demasiado separados. Se están poniendo esperanzas en la subida de las acciones que probablemente no se puedan cumplir. No va a haber tanto crecimiento para las empresas que justifique estos niveles”.

Grecia, ¿fin del rescate u otra vez el foco de tensión?
Atenas: Nick Malkoutzis, editor Kathimerini English Edition.
A finales de 2014 Grecia había conseguido sacar una pata fuera del infierno económico en el que estaba. Ahora, la tensión política amenaza con volverles a empujar ladera abajo. Su economía creció el año pasado por primera vez tras seis años de depresión y decrecimiento. No hace tanto, en 2012, el país se encogía, económicamente hablando, a ritmo de un 7%. Su PIB aumenta ahora a un ritmo de algo más de medio punto porcentual. Tras dos rescates por un total de 240.000 millones de euros desde 2010, Grecia quiere volver a financiarse en los mercados en 2015. Pero la tensión política puede volver a azotar al país. Tras la incapacidad del Parlamento para renovar al presidente, este 25 de enero hay elecciones para elegir Legislativo y Ejecutivo. “El partido de izquierdas Syriza figura en el primer puesto en todas las encuestas de opinión”, cuenta Nick Malkoutzis. “Le saca una delantera al resto en todos los sondeos de entre el 4% y el 8%, aunque esta última cifra es demasiado optimista para ellos. El problema es que su nivel de apoyos no es suficiente para gobernar. Incluso si ganaran, no obtendrían los 150 escaños o más necesarios para crear un gobierno, y no tiene posibilidad de ninguna alianza con otros partidos. Por eso está tan preocupada la gente. No necesariamente porque gobierne Syriza, sino porque hay un factor nuevo de inestabilidad: que no se pueda conseguir un Ejecutivo estable. Por lo demás, vemos algunos signos positivos como la presencia de crecimiento, que el paro cae para acercarse al 25%. Sin embargo, el desempleo de larga duración crece, hacia el 75% y creciendo, las exportaciones caen, igual que la producción industrial, y falta liquidez”. Angela Merkel y parte de su gabinete han telegrafiado a los votantes griegos en entrevistas en medios alemanes que podrían dejar salir al país del euro si incumple con los compromisos de recortes adquiridos tras el rescate en una supuesta victoria de Syriza.

¿Francia y Alemania entorpeciendo la recuperación de España o Irlanda?
Londres: Chris Williamson, economista jefe de Markit.
¿Cómo se mide el rugido del motor de las industrias, de las fábricas europeas? Los economistas consideran que el mejor medidor es una encuesta realizada entre los gestores de compras de las empresas, porque ellos son los que deciden si hay que comprar, digamos, una nueva máquina porque va a haber que producir más. Ese dato se recopila en el dato PMI [Índice de Gestores de Compras, Purchasing Manager Index] del instituto Markit. Es un número que, por encima de 50 significa que hay expansión de la industria (más datos positivos que negativos), y por debajo de 50 muestra contracción de las industrias. Por sorpresa, Alemania ha entrado en zona contractiva (49,5) por primera vez en un año y medio, uniéndose a Francia (48,4) e Italia (49). España está en máximos de siete años (54,7).
“Las industrias de Alemania y Francia son nuestro foco de preocupación. Países como Irlanda, España y Holanda están relanzando sus industrias, haciéndolo bien, boyantes, exportando”, me explica Chris Williamson, economista jefe de Markit, desde Londres. “No es sólo por el efecto rebote, también porque se están haciendo bien las cosas. Son el aspecto positivo, aunque hay un gran camino que recorrer, están yendo en la dirección correcta. La preocupación es que hay una gran desconfianza y movimiento de negocio centrales de la Unión Europea, como Francia y Alemania, y eso puede tumbar la recuperación en países como España. Los políticos deben hacer lo que puedan para que las empresas logren un pronóstico más positivo, para que gasten dinero, y ayuden a rejuvenecer la producción industrial en la región. La producción industrial de Alemania y Francia pueden continuar contrayéndose salvo que los políticos y, sobre todo, el Banco Central Europeo sean más agresivos a la hora de estimular la economía. Sólo el BCE puede dar la vuelta rápidamente a la situación”.

Un ‘año de la cabra’ global
Nueva York: José Gonzales, ECG Asset Management.
“El año 2015 es para el Horóscopo Chino el Año de la Cabra. En China, las cabras son animales con ambición espiritual. Escalan en función de progreso y realización, viven, con soltura y entusiasmo, en acantilados y montañas en posiciones que parecen imposibles y sin embargo están allí. El año que viene, para los mercados de valores, bien podría ser como el de las cabras; al filo de la navaja, al borde del abismo y, sin embargo, del progreso. Ad portas del fin del 2014 numerosos eventos geopolíticos con implicancias económicas y financieras están en proceso de desarrollo. La variable fundamental en la primera mitad del año seguirá siendo el precio del petróleo que pareciera apuntar a cambios estructurales en la oferta y la demanda del crudo, que mantendrán los precios bajos y generarán incomodidad en los mercados de Rusia y Venezuela. También en México y Brasil, y reacomodos en Medio Oriente y los Estados Unidos, donde bancos regionales podrían tener problemas. Grecia y Ucrania ofrecerán su propios retos en donde lo financiero encontrará efectos tangibles de lo político, a diferencia de este año donde la geopolítica fue localizada sin impacto económico tangible”.
¿Y que hay del comienzo del fin del embargo a Cuba? “Creará distensiones que tendrán impacto importante en el Caribe y en America Latina. Además, la continua apertura en China bien podría generar ajustes que pongan nerviosos a los mercados. Japón podría sorprender si Abenomics IIdemuestra progreso. Japón podría ser un ejemplo para Europa, que bien podría animarse a otorgarle elbazooka a los Draghinomics. La palabra final estará sin embargo, y como ha sido en estos últimos años, en la FED, que ahora subraya su paciencia en tanto normalizar las tasas de interés en el país. Si Janet Yellen no sube las tasas, los mercados seguirán subiendo a pesar que el petróleo barato, el dólar fuerte y las tasas de interés cero alimenten lo que ya se viene llamando las “ganancias recesivas”, es decir, resultados corporativos limitados a pesar de una buena performance macroeconómica que harán que los mercados sean cada vez mas caros tentando correcciones. Como se dice en mi pueblo: “la cabra siempre tira para el monte”, pero, eso sí, nunca se cae, así que los mercados podrán ver renovada volatilidad, pero no colapso. Pareciera ser que en el siglo XXI el fin del mundo no existe”.